Si Canberra es la capital de Australia, Sydney no es menos que la primera ciudad del país. Con una bahía de fama mundial, playas de ensueño y un torbellino de tiendas, restaurantes y lugares de fiesta, la sabia Sydney, el lugar de nacimiento de la nación, es exuberante y atrevida.

La ciudad más antigua de Australia. Vive en perfecto equilibrio entre modernidad y naturaleza. La Bahía de Sidney, con su incomparable Teatro de la Ópera, divide la ciudad en la zona norte y sur comunicada por el famoso Puente de la Bahía y un túnel submarino. Los principales sitios de interés se encuentran en The Rocks, Kings Cross o Darling Harbour.

PRINCIPALES ATRACCIONES

Aunque se ha visto un centenar de veces, la Ópera de Sydney (1959-1973) diseñada por el arquitecto danés Jørn Utzon no deja indiferente a nadie. Hoy en día es uno de los hitos de Australia, su estructura blanca en forma de ala entronizada majestuosamente al final de Bennelong Point. Fotogénico como el infierno, garantiza hermosas tomas desde cualquier ángulo.

Este vasto jardín botánico, donde la flora australiana se encuentra con especies de plantas de todo el mundo, es un lugar favorito para los que hacen picnic, los entusiastas del jogging y los amantes. Bordeando Farm Cove, al este de la Ópera, se estableció en 1816 en el sitio de un sitio de iniciación aborigen para servir como huerto de la ciudad.

Ya sea que lo monte o lo pise, lo suba o se acerque en bote, es difícil ignorar este puente concurrido que los lugareños llaman cariñosamente su "arco gigante". Su inmensa silueta de hecho parece, dondequiera que se encuentre en la ciudad, aparecer de repente en su campo de visión. Podría decirse que las palabras del poeta local Kenneth Slessor resumen mejor lo que es el puente para la ciudad: “Día y noche, el puente vibra y resuena como un ser vivo”.

No muchos saben acerca del pasado penitenciario de Sydney del que poco queda hoy a plena vista en la ciudad, aunque algunos resquicios pueden encontrarse en el barrio de The Rocks, la zona más trendy. Calles adoquinadas, paredes de ladrillo por doquier, parece mentira que esta antaño maltratada zona de la ciudad sea hoy el barrio de moda de Sydney. Casas adosadas, cafés con cierto aire neoyorkino y buenos lugares por donde pasear, comer o practicar shopping, un ‘deporte’ que les encanta a los australianos.

Un día en Taronga es más una expedición que una simple visita al zoológico. Primero debe atravesar el ajetreo y el bullicio de Circular Quay para abordar el ferry que atraviesa la bahía a través de la Ópera, luego tomar el teleférico en el muelle para llegar a la entrada en las alturas. Luego puede pasear por la ladera a través de las 75 hectáreas de matorral esmaltado con un recinto con Sydney como telón de fondo.

La Galería de Arte de Nueva Gales del Sur, con una fachada que evoca la antigua Grecia y una parte trasera moderna, juega un papel social central en Sydney. Alberga regularmente importantes exposiciones itinerantes internacionales (Picasso, los famosos soldados de terracota chinos, etc.) y alberga una colección notable.
arte australiano permanente, que da un lugar de honor a los aborígenes. Por último, cuenta con un rico programa de conferencias, conciertos, proyecciones, debates y actividades para niños.

El Acuario de Sydney es el sitio de pago más visitado del país (a pesar del alto precio de la entrada). Además de las paredes y estanques habituales del acuario, tiene dos túneles sumergidos, que invitan a los visitantes a encontrarse de forma segura con tiburones y rayas. A los pingüinos no les falta alegría, y las medusas ondean frente a tubos luminosos, bajo la mirada cautelosa de los pulpos. ¡Todo para el deleite de los niños, por supuesto.

Creado apenas 40 años después del desembarco de la Primera Flota, este antiguo Museo de Historia Natural se encuentra en proceso de modernización. Proyecciones de video y un terrario poblado de serpientes acompañan ahora a los peluches, y reproducciones a tamaño natural, restos de dinosaurios. Sin embargo, es su parte más anticuada y polvorienta, la Sala de los Esqueletos y la vasta colección de cristales y gemas, la que resulta más interesante.

Merece la pena subirse a cualquiera de los ferrys que parten de la estación marítima de la ciudad en Circular Quay hacia una recóndita cala o puerto. Watsons Bay es una de esas paradisíacas bahías repletas de encanto e historia a la que acceder tras un corto trayecto en ferry. Como también lo es la mítica Bondi Beach, todo un paraíso para surferos con un arraigado estilo de vida a caballo entre lo hippy y lo chic.

Bondi, una verdadera encarnación de Sydney, es la playa oceánica más cercana al centro de la ciudad (8 km) y una de las más bellas del mundo. El Pacífico golpea la costa en grandes olas espumosas y la arena pertenece democráticamente a todos. Por supuesto, hay mucha gente, pero el lugar sigue siendo apto para nadar. En mares agitados, lleve a sus hijos a las piscinas de agua salada en cada extremo.

En el puerto se puede practicar vela, piragüismo y windsurf. Spit Bridge y Balmoral son los mejores lugares para alquilar equipos. Hay buenos lugares para practicar surf en las playas de Bondi y Tamarama al sur y Narrabeen, Avalon y Palm Beach al norte. Manly es el principal centro de buceo de Sydney. En ausencia de olas, las playas de Camp Cove, Balmoral y Chinaman brindan un escenario pintoresco para nadar. Para el bodysurf, elige Bondi, Tamarama o Bronte, en la costa sur, o cualquier playa de los 30 km de costa que separan Manly de Palm Beach, al norte.

Puede hacer muchas caminatas en el monte (senderismo), el Parque Nacional Real, el Parque Nacional Ku-ring-gai Chase y el Parque Nacional del Puerto de Sydney. El Manly Scenic Walkway, de 10 km de largo, comienza al oeste de Manly, pasa por alto North Harbour y Middle Harbour, bordea las casas en el paseo marítimo, ofrece vistas de la bahía, cruza parte del Parque Nacional Sydney Harbour y termina en Spit Bridge. Mucho más corto pero igual de hermoso, el camino de Bronte a Bondi Beach corre a lo largo de los acantilados. Es posible alquilar caballos para pasear por Centennial Park, que se extiende entre Paddington y Bondi. Los entusiastas de correr y patinar son tan numerosos allí como en las caminatas Bondi y Manly.


Sydney


The Sydney Opera House


Harbour Bridge


The Rocks


The Rocks


The Rocks


The Rocks & Circular Quay


The Sydney Opera House


The Opera Theatre, The Sydney Opera House


The Concert Hall, The Sydney Opera House


Royal Botanic Gardens


Darling Harbour


Darling Harbour


Bahía de Sydney


Hyde Park


Terrace Houses, Paddington


Harbour Bridge Climb


Taronga Zoo

Taronga Zoo


Panda Rojo, Taronga Zoo


Taronga Zoo


Luna Park


Bondi Beach


Three Sisters, Blue Mountains