Copenhague

Copenhague es una capital avanzada a su tiempo, cuna del diseño y de la sostenibilidad, donde las bicicletas y los espacios verdes forman parte del skyline de la ciudad. La capital de Dinamarca es un destino en auge gracias a sus monumentos, su gastronomía, sus castillos y sus múltiples caras. ¿Necesitas más razones para viajar a Copenhague?

¿Por qué visitar Copenhague?

Copenhague es una ciudad de contrastes. Sus históricos castillos y palacios reales, reflejo de la importancia de la monarquía de Dinamarca, conviven con la ciudad libre de Christiania, un barrio hippy regido por sus propias normas. Además, el segundo parque de atracciones más antiguo del mundo, los Jardines Tívoli, se ubica a pocos metros de un edificio modernista muy característico: la Biblioteca Real.

En los museos más importantes de Copenhague es posible seguir las huellas de vikingos, monarcas, nazis y otros grupos que han ido perfilando el pasado y el presente de la ciudad. La emocionante historia de Copenhague ha transcurrido impasible ante los ojos de bronce más famosos del país, los de la Sirenita de Copenhague.

Por si esto fuera poco, la capital de Dinamarca ha sido reconocida en varias ocasiones como la ciudad con mejor calidad de vida del mundo. Sus habitantes sonríen ante el frío, se mueven en bicicleta y son amantes de la jardinería. El gusto por las cosas cotidianas se resume en un pensamiento propio de Copenhague: la filosofía hygge.

Copenhague en cifras

Copenhague es la capital de Dinamarca y su ciudad más poblada con 1.2 millones de habitantes (2018). Se encuentra en la isla de Selandia y es considerada una de las mejores ciudades del mundo para vivir. En 2014, Copenhague se convirtió en Capital Verde Europea.

Geografía de Dinamarca

El Reino de Dinamarca es un archipiélago del norte de Europa formado por 444 islas. Forma parte de los países escandinavos y está bañado por el mar del Norte y el mar Báltico. Curiosamente, podría ser el país más grande de la Unión Europea si se contabilizasen sus territorios autónomos más importantes: Groenlandia y las islas Feroe.

La ciudad de las bicicletas

En Copenhague hay más bicicletas que personas. Uno de cada tres habitantes de la capital va al trabajo en bicicleta y es bastante frecuente que muchas familias ni siquiera tengan coche. En Copenhague hay casi 400 kilómetros de carril bici, por lo que pedalear es una de las opciones de transporte favoritas de sus habitantes.

Qué ver en Copenhague

Copenhague está llena de monumentos y atracciones que ver, como la famosa Sirenitala ciudad libre de Christiania, el canal Nyhavn, el castillo de Rosenborg y muchas otras visitas obligadas. ¡Descúbrelo! 

La sirenita de Copenhague

¿En quién se inspira la sirenita de Copenhague? ¿Por qué ha sido víctima de numerosos actos vandálicos? ¿Qué relación guarda con el fundador de la cerveza Carlsberg? Conoce la apasionante historia del monumento más visitado de Copenhague.

El icono indiscutible de Copenhague es la sirenita de bronce que descansa sobre una roca en el puerto de la capital, a orillas del Báltico. Desde su nacimiento en 1913, esta curiosa figura ha suscitado todo tipo de leyendas, actos vandálicos y curiosas anécdotas. Mide 125 centímetros y pesa 180 kilos.

La historia de la sirenita

La sirenita fue diseñada por encargo de Carl Jacobsen, hijo del fundador de la marca de cerveza danesa Carslberg, que quiso regalarle a la ciudad de Copenhague una escultura única. El elegido para hacer su deseo realidad fue el escultor danés Edvard Eriksen.  

El objetivo de Jacobsen era homenajear al escritor de cuentos Hans Christian Andersen y a su obra maestra: La sirenita. La historia de esta joven sirena que renunció a su vida por estar con su amado es palpable en el rostro de la escultura, que mira con melancolía hacia el mar.

El escultor Erikson quiso usar como modelo a la bailarina de ballet Ellen Price, que se hizo famosa en Dinamarca precisamente por interpretar el papel de sirenita. Sin embargo, ante la negativa de la artista a posar desnuda, el escultor tuvo que inspirarse en el cuerpo de su mujer, utilizando tan solo la cabeza y el rostro de la bailarina.

Desde 1913, la sirenita (Den lille havfrue en danés) ha recibido a millones de visitantes que la han consagrado como el monumento más visitado de Copenhague.

En el año 2010, la sirenita viajó hasta Asia para representar a Dinamarca en la Expo de Shanghái. Durante los seis meses que estuvo fuera, una pantalla colocada en la roca proyectó imágenes en directo de la sirenita desde Shanghái.

Curiosidades y actos vandálicos

La sirenita de Copenhague ha sido decapitada en dos ocasiones, pintada de varios colores e incluso arrojada al mar cuando un pequeño artefacto la arrancó de la roca. La cabeza actual de la sirenita es una réplica de la original, que nunca fue recuperada tras ser robada por primera vez.

La fama de la sirenita es tal que, desde el año 2012, cuenta con un alter ego masculino en la ciudad danesa de Elsinore. Su nombre es Han y está fabricado con varios metales que hacen el efecto de espejo. Además, gracias a un complejo mecanismo, ¡la estatua parpadea cada hora!

Lugares próximos

 

Canal Nyhavn

La imagen típica de las postales de Copenhague son las casas de colores a orillas del canal Nyhavn, en pleno centro de la ciudad. Sus terrazas a orillas del canal o sus barcos encallados en el mar hacen de Nyhavn uno de los lugares con más encanto de Copenhague

A mediados del siglo XVII, el rey Christian V ordenó construir el canal de Nyhavn como principal puerta de entrada del mar en Copenhague. Esta zona pronto se hizo famosa por sus cervecerías y locales de prostitución, aunque hoy en día ha cambiado radicalmente su esencia.

La imagen más bonita de Copenhague

Seguramente, después de la sirenita, la segunda imagen que se le viene a todo el mundo a la cabeza al pensar en Copenhague son las casas de colores del canal Nyhavn. Este paisaje de postal es uno de los lugares más visitados de la ciudad por sus históricos barcos de madera, los numerosos restaurantes de la zona y el animado ambiente que hay siempre en Nyhavn.

El Ancla Memorial

A escasos metros del canal Nyhavn se encuentra una de las esculturas más significativas de Copenhague: el Ancla Memorial (Mindeankeret). Esta escultura es un homenaje a los marinos caídos en la Segunda Guerra Mundial defendiendo a Copenhague de los ataques y bombardeos alemanes.

El Ancla Memorial siempre amanece con flores y velas en honor a los más de 1.700 oficiales y militares daneses que perdieron la vida en uno de los peores espisodios de la historia de Copenhague.

 

Qué hacer en Nyhavn

  • Dar un paseo en barco por los canales: el canal Nyhavn es el punto de inicio de las múltiples rutas que recorren en barco los canales de Copenhague.
  • Comer a orillas del canal: sus numerosas terrazas y restaurantes convierten a Nyhavn en una de las mejores zonas donde comer en Copenhague. ¡También encontraréis cafeterías del siglo XVII!
  • Hacerse un tatuaje: por extraño que pueda parecer, Nyhavn es la zona que concentra más estudios de tatuajes en Copenhague. Si estáis pensando llevaros un recuerdo imborrable de Dinamarca, esta es la zona indicada para ello

Lugares próximos

You are now entering the European Union" es el cartel que separa a la ciudad libre de Christiania del resto de Copenhague. Este barrio hippy autogestionado no se parece a ningún otro lugar del mundo. ¡Descubre por qué!

En pleno corazón de la capital se encuentra el barrio más impactante de Copenhague: Christiania. Este barrio hippy tiene una historia, un ambiente y un estilo de vida difíciles de encontrar en cualquier otra parte del mundo.

Los orígenes de Christiania

A principios de los años setenta, una zona del barrio de Christianshavn utilizada con fines militares quedó abandonada. Algunas familias de Copenhague decidieron instalarse en la zona y vivir ajenos a las normas establecidas por la sociedad. Pronto llegaron más familias atraídas por esta idea de libertad y se creó una auténtica comunidad hippy regida por sus propias normas: Christiania.

Hoy en día, poco más de mil personas viven en la ciudad libre de Christiania. Se consideran independientes de Dinamarca y de la Unión Europea, tal y como dicta el famoso cartel de la salida del barrio que anuncia “Estás entrando de nuevo en la Unión Europea”.

A lo largo de sus casi cincuenta años de vida, Christiania ha sido un barrio autogestionado basado en principios como el reciclaje, el arte al aire libre y la colaboración entre vecinos. Sus habitantes no pagan impuestos, por lo que los productos aquí son mucho más baratos. Christiania es una zona perfecta para ir de compras en Copenhague y adquirir souvenirs hechos a mano por los locales, ropa de segunda mano o postales en acuarela.

Venta de drogas en Christiania

Desde su aparición en 1971, el bario libre de Christiania se hizo famoso por la legalización de la venta y el consumo de drogas. Debido a la controversia que esto ha generado en los últimos años, la policía de Copenhague ha aumentado la vigilancia de la zona y el gobierno ha prohibido la venta de drogas.

Sin embargo, en Christiania es fácil encontrar drogas blandas como marihuana y hachís. La calle Pusher, decorada con farolillos rojos, es la principal avenida de Christinia y concentra numerosos puestos donde comprar marihuana y hachís. Además, en todo el barrio hay tiendas especializadas en artículos para fumadores.

La única regla de la calle Pusher es que está prohibido hacer fotos.

Una visita imprescindible

Christiania es el lugar más llamativo de Copenhague y una visita imprescindible en la capital danesa. ¡Su ambiente hippy os enamorará! A cualquier hora del día es posible tomar algo, escuchar a gente tocando la guitarra y disfrutar de su ambiente único.  

Además, visitar Christiania es totalmente seguro y no existen problemas de violencia o vandalismo. Tan solo debéis respetar a los lugareños y tener muy en cuenta los carteles que avisan de que está prohibido hacer fotografías en la calle Pusher.

Lugares próximos

 

Jardines Tívoli

Dentro de las atracciones de Copenhague, los Jardines Tívoli es la más popular, con más de 4 millones de visitantes al año. Desde su inauguración en 1843, el Tívoli ha sabido mantener su aura de fantasía y diversión, enamorando tanto a pequeños como adultos.

A finales del siglo XIX, el diplomático danés Georg Carstensen convenció al rey Christian VIII de construir un parque de atracciones en Copenhague para que la gente se divirtiera y no pensara en los problemas políticos que asolaban la corona.

Desde su construcción en 1843, los Jardines Tívoli se han convertido en uno de los lugares favoritos de los daneses, ya que combinan su esencia original con las atracciones más modernas. La entrada principal al Tívoli se ha mantenido intacta desde su construcción.

El Tívoli es el segundo parque de atracciones más antiguo del mundo solo por detrás de Dyrehavsbakken, también en Dinamarca. Llama la atención que incluso los históricos monumentos que rodean al Tívoli, el Ayuntamiento de Copenhague y la Estación Central, son posteriores a este mítico parque de atracciones.

La importancia del Tívoli es tal que hasta el mítico parque Disneyland Paris se inspiró en los Jardines Tívoli para crear este lugar de fantasía.

Qué ver en los Jardines Tívoli

Los Jardines Tívoli son una atracción turística excelente, sobre todo si viajáis en familia. Paseando por los jardines es posible ver desfilar a la Guardia del Tívoli, un grupo de guardias jóvenes vestidos con un traje similar al de la Guardia Real del Palacio de Amalienborg.

Los edificios más famosos de los Jardines Tívoli simulan construcciones famosas de todas partes del mundo, como una pagoda, un palacio árabe y hasta una fragata.

Entre los espectáculos del Tívoli destaca Pantomima Theatre, varios shows de pantomima y ballet que se representan en los distintos escenarios al aire libre. Además, si tenéis suerte, podréis disfrutar del Friday Rock. Se trata de un festival de rock de bandas danesas que se celebra cada viernes dentro del parque.

Principales atracciones

Vértigo: no apta para personas con miedo a las alturas. Esta atracción eleva a los más valientes a más de 100 kilómetros por hora con giros de 360 grados. ¡Una bomba!

Demon: montaña rusa ambientada en el Imperio Chino, con loopings y caídas que dispararán vuestra adrenalina. Además, ofrece la opción de vivir la experiencia con gafas de realidad virtual.

Fatamorgana: esta torre de 45 metros de altura ofrece emoción para todas las edades gracias a sus tres niveles de velocidad.

Golden Tower: es la caída libre del Tívoli, con más de 60 metros de altura.

Grand Prix: este circuito de habilidades está pensado para la divertir a gente de todas las edades.

La Mina: es la montaña rusa más antigua del parque, una atracción pensada para todas las edades que está enteramente hecha de madera.

The Star Flyer: uno de los mejores miradores de Copenhague es el Star Flyer del Tívoli, una cadenas que se elevan a más de 80 metros de altura.

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Palacio de Christiansborg

El impresionante Palacio de Christiansborg fue la residencia real de la monarquía danesa hasta 1794, cuando se mudaron al Palacio de Amalienborg. Hoy en día, Christiansborg es uno de los monumentos más visitados de Copenhague y sigue prestando servicios ocasionales a la Corona.

 

Un poco de historia

Los orígenes del Palacio de Christiansborg se remontan al siglo XII, cuando el obispo guerrero Absalón, fundador de Copenhague, mandó construir un enorme palacio donde fijar su residencia. Desde entonces, la familia real danesa ha vivido en Chstiansborg durante siglos, hasta que en 1794 un terrible incendio los obligó a mudarse al Palacio de Amalienborg.

En 1884, un segundo incendio arrasó gran parte de Christiansborg. Tras la tercera reedificación, los arquitectos decidieron colocar tres coronas en la cúspide de la torre para simbolizar las distintas reconstrucciones del Palacio de Christiansborg.

En la actualidad, el Palacio de Christiansborg está al servicio del estado. Es la sede del Parlamento de Dinamarca y de los poderes judicial y ejecutivo; lo que convierte a Christiansborg en el único edificio del mundo en albergar los tres poderes del Estado.

Qué ver en el Palacio de Christiansborg

Las ruinas del palacio

En las ruinas de Christiansborg es posible ver los restos de las dos construcciones anteriores: el palacio de Absalón de 1167 y el palacio levantado tras el incendio de 1794. La exposición también alberga restos de la antigua muralla y el foso, lo que permite recorrer los casi nueve siglos de historia del Palacio de Christiansborg.

Las estancias reales

La parte más interesante de la visita al Palacio de Christiansborg es adentrarse en las estancias reales e imaginar cómo era la vida de la realeza hace varios siglos. Los pasillos del castillo están decorados con retratos de la familia real de Dinamarca y cada habitación cumple una función determinada.

Además de la habitación del rey y de la reina, destacan la biblioteca real, la sala del trono, la sala del banquete y la impresionante sala de tapices. Esta última habitación puede albergar a más de 400 invitados y es la más llamativa del palacio, lo que hace que la reina Margarita II la use para celebrar elegantes eventos internacionales.            

Los establos y las caballerizas

Las caballerizas reales albergan antiguos carruajes de época que han sido utilizados por la familia real danesa a lo largo de la historia de Copenhague. En los establos también es posible ver los caballos de la Corona, al servicio de la Guardia Real.

A mediados del siglo XVIII, los establos del Palacio de Christiansborg llegaron a albergar más de 250 caballos.

Mirador de la torre de Christiansborg

Hay muchos miradores en la capital, pero subir a la torre de Christiansborg es una visita imprescindible en Copenhague. Además, ¡es gratis! La entrada a la torre de Christiansborg permaneció en secreto durante casi un siglo, cuando solo algunos miembros de la realeza podían acceder a la torre más alta de Copenhague.

Hoy en día, la torre alberga varias salas que exponen esculturas y objetos históricos, un restaurante y fotografías que recorren la historia del Palacio de Christiansborg. Las vistas desde la cima permiten ver Christiansborg desde una perspectiva diferente y disfrutar de una imagen panorámica de Copenhague.

Gracias a las tres coronas que rematan la cúspide, la torre de Christiansborg es la más alta de Copenhague, seguida muy de cerca por la torre del Ayuntamiento de Copenhague.  

Lugares próximos

LA SIRENITA


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CANAL NYHAVN